JUAN XXIII

Angelo Giuseppe Roncalli nació el 25 de noviembre del año 1881 en Sotto il Monte (Lombardía, Italia).
Roncalli entró en el seminario de Bérgamo en el año 1892 y recibió la tonsura dos años más tarde. En el año 1896 fue admitido en la Orden Franciscana Seglar por el director espiritual del seminario de Bérgamo, el padre Luigi Isacchi. Hizo profesión de esa regla de vida el 23 de mayo del año 1897. En septiembre de 1900 se trasladó a Roma para continuar su formación sacerdotal en el Pontificio Seminario Romano, formación que se vio interrumpida entre los años 1901 y 1902 por el servicio militar. El 13 de junio de 1903 se doctoró en Teología, siendo ordenado sacerdote el 10 de agosto del año 1904, en la basílica de Santa María de Monte Santo, en la Piazza del Popolo. En el año 1905 fue nombrado secretario del obispo de Bérgamo, Giacomo Radini-Tedeschi. Al año siguiente se le encargó la enseñanza de Historia y Patrología en el seminario de Bérgamo; ocupó estos puestos hasta la muerte en 1914 de "su obispo", como siempre recordaría a Radini-Tedeschi.
Durante la 1ª Guerra Mundial ejerció primero como sargento médico, y más tarde como capellán militar. En diciembre del año 1920 fue llamado a Roma por Benedicto XV para ocupar el cargo de presidente para Italia del Consejo Central de la Obra Pontificia de la Propagación de la Fe, y en 1921 fue designado prelado doméstico por Benedicto XV.
Posteriormente, Pío XI lo designaría simultáneamente arzobispo de Areopoli y enviado oficial para Bulgaria el 3 de marzo del año 1925; su consagración como arzobispo sería el 19 de marzo. En Bulgaria, realizó su labor apostólica visitando las comunidades católicas y estableciendo relaciones de fraternidad con otras comunidades cristianas, en especial con la Iglesia Ortodoxa. La labor de Angello Roncalli fue tan fructífera que se le designó Delegado Apostólico para Bulgaria el 16 de octubre del año 1931.
El 30 de noviembre de 1934 fue designado arzobispo titular de Mesembria, Delegado Apostólico para Turquía —vicario apostólico de Estambul, antigua Vicaría Apostólica de Constantinopla—, y Delegado Apostólico para Grecia. Desde Estambul, atendió los asuntos relativos a ambos países y estableció una oficina para localizar a los prisioneros de guerra. Fue quien introdujo la lectura del Evangelio en turco, logrando así acortar las distancias entre la el Vaticano y las iglesias ortodoxa y musulmana.
Durante la 2ª Guerra Mundial, socorrió a miles de judíos de la persecución nazi mientras servía como delegado apostólico en Turquía.
El 23 de diciembre del año 1944, Pio XII lo nombró Nuncio Apostólico en Francia, contribuyendo a normalizar la organización eclesiástica de este país, desestabilizada por los obispos acusados de colaborar con los nazis.
El 12 de enero del año 1953, Pio XII lo creó cardenal con el título de Santa Prisca, siendo designado tres días después como Patriarca de la diócesis de Venecia. Durante los seis años en que permaneció en este cargo, tuvo un desempeño esencialmente pastoral, impulsando el sínodo diocesano. Como patriarca de Venecia, solía navegar por los canales de la ciudad sin la vestimenta de cardenal, y detenerse para hablar con los gondoleros, las prostitutas y los mendigos.
Del 15 al 30 de julio del año 1954, el cardenal Roncalli peregrinó a España con ocasión del Año Santo Jacobeo. Visitó, entre otros lugares, San Sebastián, Pamplona, Javier, Bilbao, Comillas, Covadonga, Oviedo, Gijón, Lugo, Santiago de Compostela, León, Salamanca, Ávila, Valladolid, Soria, Zaragoza, Lérida, Montserrat, y Barcelona.
El 28 de octubre del año 1958, en el cuarto día del cónclave y contando 76 años, Angello Roncalli fue elegido Sucesor de San Pedro, ante la sorpresa de todo el mundo; escogió el nombre de Juan por dos santos: Juan Bautista y Juan Evangelista. Fue entronizado el 4 de noviembre tras el largo pontificado de su predecesor Pio XII, en el que los cardenales que parecieron escogerle en lo que comúnmente llamaron "un papa de transición" a causa de su avanzada edad.
Fue el primer papa de la iglesia romana desde 1870 que ejerció su ministerio de obispo de Roma visitando personalmente las parroquias de su diócesis; al cabo de dos meses de haber sido elegido, por Navidad visitó los niños enfermos de los hospitales Espíritu Santo y Niño Jesús, y al día siguiente fue a visitar los prisioneros de la cárcel Regina Coeli. Su primera medida de gobierno le enfrentó con el resto de la curia romana, ya que redujo los altos estipendios y la vida de lujo que llevaban muchos de los obispos y cardenales de la misma. Asimismo, dignificó las condiciones laborales de los trabajadores del Estado Vaticano, que carecían de muchos de los derechos de los trabajadores de Europa, retribuidos además con bajos salarios.
Durante su pontificado nombró 37 nuevos cardenales, entre los cuales y por primera vez en la historia vaticana nombraría a un tanzano, un japonés, un filipino, un venezolano, un uruguayo, y un mexicano.
Escribió ocho encíclicas en total, entre las cuales destacó Pacem in terris (11 de abril de 1963) y que iba dirigida no solo a los católicos, sino "a todos los hombres de buena voluntad". Escrita tras la crisis de los misiles en Cuba en octubre de 1962, la encíclica contiene un rechazo incondicional a la carrera armamentística y a la guerra en sí misma.
Tres meses después de su elección, el 25 de enero del año 1959, en la Basílica de San Pablo Extramuros y ante la sorpresa de todo el mundo, anunció el XXI Concilio Ecuménico -llamado posteriormente "Concilio Vaticano II"-, el Iº Sínodo de la Diócesis de Roma, y la revisión del Código de Derecho Canónico. Al Concilio fueron invitados como observadores miembros de diversos credos: desde creyentes islámicos hasta indios americanos, al igual que miembros de todas las Iglesias cristianas: ortodoxos, anglicanos, cuáqueros, y protestantes en general, incluyendo evangélicos, metodistas y calvinistas no presentes en Roma desde el tiempo de los Cismas.
El 23 de mayo del año 1963 se anunció públicamente su enfermedad: cáncer de estómago que, según su secretario Loris Francesco Capovilla, le fue diagnosticado en septiembre de 1962 pero que no quiso dejarse operar, temiendo que el rumbo del Concilio se desviara de lo estipulado.
Después de sufrir esa grave enfermedad, el Juan XXIII se reunió con el Señor el 3 de junio del año 1963, no pudiendo ver concluido el Concilio.
En la memoria de muchas personas, el Juan XXIII ha quedado como "el Papa bueno" o "el Papa de la Paz".
SOLEDAD TORRES ACOSTA

María Soledad Torres Acosta, cuyo nombre secular era Bibiana Antonia Manuela Torres Acosta (Madrid, 2 de diciembre de 1826 - +Madrid, 11 de octubre de 1887) fue una religiosa española, fundadora de la Congregación de las Siervas de María Ministras de los Enfermos.
Desde su juventud demostró gran solicitud hacia los enfermos pobres, a los que atendió con total abnegación desde la fundación de la Congregación hasta el mismo día de su muerte.
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