Memoria de la advocación de la Virgen del Carmen o Nuestra Señora del Carmen, o Bienaventurada Virgen María del Monte Carmelo, en Tierra Santa, cerca de Haifa; monte en el que Elías consiguió que el pueblo de Israel volviese a dar culto al Dios vivo y en el que, más tarde, algunos, buscando la soledad, se retiraron para hacer vida eremítica, dando origen con el correr del tiempo a una orden religiosa de vida contemplativa, la Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo, llamados carmelitas.

Carmelo o Carmen derivan de la palabra hebrea Karmel o Al-Karem que se podría traducir como "jardín de Dios".

La Virgen del Carmen también es llamada "Estrella del Mar" (en latín Stella Maris).

Según la tradición carmelita, el 16 de julio del año 1251, la imagen de la Virgen del Carmen se habría aparecido a San Simón Stock, superior general en ese momento de la Orden carmelitana, entregándole el escapulario, que es el principal signo del culto mariano carmelita, y con el que prometía librar del castigo eterno a los que lo llevasen. 

También, según la tradición, en el siglo XIV la Virgen se apareció a Juan XXII, al que le prometió ayuda contra sus adversarios si otorgaba una nueva aprobación a los carmelitas. La Virgen también prometió la salvación de los carmelitas profesos y de los devotos que llevasen la señal del hábito o el escapulario y cumpliesen prescripciones de oración; y en caso de que correspondiese a su estado canónico de castidad, la Virgen descendería al Purgatorio el primer sábado después de la muerte de las personas para llevar sus almas al cielo. De ahí que esto recibiese el nombre de "privilegio sabatino". Esto fue aprobado por Juan XXII en la Bula Sabatina del 3 de marzo de 1322.
Posteriormente, fue aprobado también por Clemente VII con el "Breve Dilecti filii" de 1527.

 

España es uno de los países donde más arraigada se encuentra esta advocación.
Es patrona de los marineros, lo que incluye a los pescadores y marinos mercantes. 

El 19 de abril de 1901 la regente María Cristina de Habsburgo y el ministro de Marina Cristóbal Colón de la Cerda, duque de Veragua, refrendaron con sus firmas la Real Orden por la cual se proclamó a la Santísima Virgen del Carmen como Patrona de la Armada Española.
​En el Capítulo General de Londres (1254) de los carmelitas, se dio la orden de fundar en España y como consecuencia, hacia 1270, se llevaron a cabo las primeras fundaciones en algunas de las más importantes ciudades de la Corona de Aragón. Su iniciativa fue impulsada por monarcas como Jaime I (1213-1276) o su nieto Jaime II.
En la Corona de Castilla la primera fundación fue en Valladolid, en el convento de San Pablo de la Moraleja (1315).
Su propagación fue rápida por toda la península ibérica, y llegó a Sevilla en 1358, ciudad desde la que se impulsará la creación de la destacada Provincia Bética Carmelitana, en 1499. En esta época empezarán a surgir las primeras comunidades femeninas de religiosas carmelitas en todo el territorio. 

Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz, durante el siglo XVI, introdujeron profundas reformas en el seno de la Orden que dieron origen a los "Carmelitas Descalzos", una nueva congregación más austera que se separa de la orden madre, la cual pasó a llamarse "Carmelitas Calzados" o de la "Antigua Observancia".
A pesar de esta división, continuaron en siglos sucesivos su camino espiritual por todo el mundo.


Prácticamente todos los pueblos y ciudades de la costa española rinden culto religioso a la Virgen del Carmen, se organizan procesiones y vistosas romerías marítimas portando su imagen cada 16 de julio.

La devoción a la Virgen del Carmen fue llevada por los misioneros españoles en la época de la colonización española de América, y está por tanto íntimamente unida a la historia de Hispanoamérica. Uno de los países americanos que más culto rinde a esta advocación es Argentina, seguida de Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Estados Unidos, Guatemala, México, Nicaragua, Panamá, Perú, Uruguay, y Venezuela.


Añadir comentario

Comentarios

Todavía no hay comentarios